lunes, 4 de junio de 2012

Yo si fuí a la marcha

Con la frase "yo si voy a la marcha" comenzó a anunciarse de modo muy discreto la edición numero 34 de la marcha del orgullo para este sábado 02 de junio, así que saliendo de la facultad decidí ir a darme una vuelta para ver de cerca el evento, la cita era al medio día en el Ángel de la independencia desde donde partiría la marcha en dirección al Zócalo, por lo tanto la estación del metro mas cercana era insurgentes. Al llegar lo primero que me sorprendió fue la enorme cantidad de gente que había, en su mayoría jóvenes, algunos miraban impacientes el reloj mientras aguardaban la llegada de sus amigos, otros echaban en la mochila su ropa de todos los días para vestirse y desvestirse con atuendos multicolores, algunos mas elaboraban cartulinas con consignas, mientras ellas y ellos retocaban su maquillaje y guardaban los tenis en la mochila para intercambiarlos por botas y pumps de plataforma.

Una vez afuera de la glorieta y caminando por las calles de la zona rosa, se veían todo tipo de escenas curiosas, en mi particular opinión la mas divertida ocurrió en la calle de Niza mientras me dirigía hacia reforma, caminaba detrás de dos chicas travestis bastante altas y guapas, cuando un distraído y azorado sujeto de traje negro que cruzaba la calle se les quedo mirando de reojo con tal sorpresa que jamas advirtió la caseta del teléfono contra la cual choco con semejante fuerza que por poquito y la echa abajo, sin embargo creo que le dolió mucho mas ser visto por todos los que caminábamos por la banqueta que de inmediato hizo como si nada y apretó el paso para alejarse de ahí, yo no pude evitar seguir mi camino con una sonrisa muy bastante divertido por lo sucedido.

Ya en reforma, saqué la cámara para conservar algunas imágenes y caminé rumbo al Ángel, sobre la acera había bastantes espectadores los cuales formaban una valla, algunos eran simples curiosos que iban pasando y se quedaron a mirar, otros eran familiares de los asistentes o simpatizantes con el movimiento LGBTTTI y quizá algunos mas eran simplemente "banqueteros", (termino que usan los que marchan para referirse a los de "closet" que se quedan en la banqueta) o al menos eso fue lo que entendí escuchando las conversaciones ahí metido en la bola observando como crecía cada vez mas la multitud y se llenaba de color el paseo de la reforma. Además de simpatizantes y espectadores a la marcha también se dio cita el comercio informal y ambulante, que ofrecía banderitas, pelucas, accesorios multicoloridos, sombreros para el sol ( ¡y vaya que me arrepentí de no comprar uno desde el principio!) pilas para la cámara, refrescos y botellas de agua para re-hidratarte; para reunir fuerzas (pues no debe ser tarea facial caminar con tacones de plataforma del ángel al zócalo) también se vendían bebidas energéticas así como cervezas para quitar esa sed que es más caprichosa y de paso quitar también las inhibiciones.

Apenas unos cuantos minutos después de las doce la marcha dio inicio, yo me esperaba un inicio más formal, alguien en un altavoz dirigiendo quizás algunas palabras o algo que anunciara el inicio, pero tal vez me encontraba demasiado lejos así que solamente me entere que había iniciado en cuanto todos comenzaron a caminar. Con el fin de tomar unas fotos me subí al camellón sobre los montículos en forma triangular que dividen reforma para tomar algunas fotos y antes de darme cuenta se hizo la valla también de ese lado y me quede fuera de la marcha por lo que tuve que caminar hasta la glorieta de la palma en donde el cerco humano se adelgazaba y me metí de nuevo a la marcha para seguir tomando fotografías y una vez dentro en cierto modo y sin habérmelo propuesto acabe marchando hacia el Zócalo también.

Esto en particular es un sentimiento curioso, me refiero al estar ahí y ser parte del contingente aun cuando a ratos me sentía excluido, la verdad en ese preciso momento creo que me habría sentido mas cómodo y mas integrado de haber llevado algo que me vinculara un poco mas a la marcha, sé que simpatizar con el movimiento, compartir sus ideales de igualdad, el apoyar su lucha contra la discriminación, el practicar la tolerancia y el respeto son quizá requisitos suficientes para acudir, pero creo que también hubiera sido interesante asistir de manera menos solemne, a final de cuentas el objetivo de la marcha ya no es tanto el reclamo y la exigencia, sino la celebración por los espacios que el movimiento ha ganado (sobre todo en el DF). Antes del día de ayer pensaba que lo excentrico de la marcha solo era una forma de llamar la atención, pero me dí cuenta que no es solamente eso, la marcha también ofrece un espacio seguro donde expresar libremente su identidad, creatividad, preferencias, aspiraciones y poder compartirlos.

La marcha avanzo sobre reforma, la diversidad en todos los aspectos y en su máxima expresión, jóvenes y adultos de todas las edades, cuerpos esbeltos, cuerpos con unos kilos de mas, cuerpos esculturales, modificados con hormonas, con cirugías o dietas y ejercicios; la gran mayoría vestidos con ropa casual, (mezclilla, playera, tenis, gorra, etc) quizá un inmenso 10% con atuendos mas exóticos y diseños propios acordes a sus gustos y preferencias, orgullosos de ser leales y honestos consigo mismos, orgullosos de no vivir en la negación o el conflicto, orgullosos porque a pesar de lo difícil que es encontrar aceptación y respeto se tienen los unos a los otros, creo que en eso radica el orgullo de esta marcha, no es el orgullo de pertenecer a cierta condición o por tener determinada preferencia, radica en que sin importar las dificultades defienden su derecho a ser felices de la forma en que han elegido vivir la vida y su derecho a ser felices con lo que decidan.

Durante el recorrido vi pasar a mi lado un travesti musculoso en un vestido entallado, una pareja de hombres la tercera edad muy amorosos, transexuales sumamente femeninas y guapas, un chico vestido de angelito, otro disfrazado de pantera rosa y un repartidor de pizza muy peculiar pero muy simpático, entre muchos otros personajes, sin olvidar los trailers que improvisados como carros alegóricos patrocinados por los antros y las discos de la zona ofrecían una probadita de la música, el ambiente y desde luego de sus stripers que con poses sugerentes regalaban volantes y publicidad a su paso; por instantes la marcha parecía un desfile, un carnaval, con la diferencia de que en dichos eventos solo puedes observar si llegaste temprano y estás hasta adelante y aquí si así lo deseabas podías ser parte del contingente, ser parte del espectáculo y porque no, hasta despertar un poco de envidia de la buena, ganar la admiración de todos, dibujarles una sonrisa o ponerlos muy nerviosos, en este sentido la marcha fue muy divertida y creo que esto ayuda a fomentar la convivencia y la aceptación, a que la gente se de cuenta que no son malas personas, que no te van a morder y que no pasa nada por estar con ellos.

Al llegar a la avenida Juárez había un mucho mayor numero de espectadores así que fue difícil seguir tomando fotos y tuve que continuar hasta bellas artes donde encontré un buen lugar que compartí con una fotógrafa profesional, (si quieren buenas fotos acérquense a los profesionales... a ellos siempre les regalan las mejores poses y las mejores sonrisas) ahí me quede un buen rato esperando que terminara la marcha, pero era impresionante la cantidad de asistentes, cuatro horas y media después y seguían avanzando, quizá ya no con las mismas energías, pues note que había quienes ya de plano iban con los los pies descalzos debido a lo difícil que es caminar con tacones de 12cm, entre otras cosas curiosas que pude ver, hubo un momento en que un grupo de chavos de un estacionamiento que salieron a mirar la marcha, estaban en su desmadre ajenos al movimiento, cuando ante la sorpresa de sus amigos uno de ellos se acerco a una simpática chica trans vestida de "Alicia" y le pregunto si se podía tomar una foto con ella, al abrazarse para la foto todos exclamaron el clásico "ehhh" haciendo que se sonrojara la improvisada pareja y les tomaron la foto, sucedió en un instante y después ella corrió a alcanzar a su amiga y el volvió con sus compañeros, esa pequeña escena de algún modo me devolvió la fe en las personas, en que quizá algún día desaparecerá la homofobia y la discriminación.

Minutos mas tarde las baterías recargables de la cámara llegaron a su fin y como ya era tarde decidí que era hora de regresar a casa, honestamente la pase muy bien a pesar de tener el defecto de sentirme la persona mas solitaria aun en los lugares mas concurridos, la verdad hubo muchos pequeños detalles que me hicieron feliz durante el día, que me hicieron reflexionar y hasta envidiar en el buen sentido a quienes a pesar de lo complicado que de por si es encontrar una pareja o buenos amigos los encontraron y estaban ahí con ellos. Creo que algunas veces también nos puede hacer felices la dicha y la fortuna de los demás, como un reflejo como cuando alguien bosteza o mejor aun te sonríe y sin date cuenta le devuelves la sonrisa, yo no tengo mucho contacto humano en mi vida diaria pero no por eso deja de parecerme fascinante cuando tengo la oportunidad de observarlo y definitivamente es una de esas cosas que de alguna manera me dibujan una sonrisa y me inyectan un poco de esperanza.

Nos leemos!!!


(Nota: Si apareces en alguna fotografía y consideras que estoy afectando tu imagen, déjame un comentario para removerla)










































----- (off the blog: Entre uno de tantos momentos y cosas curiosas, hubo uno de esos que es difícil admitir, aun en un blog que nadie lee... Hubo una chica, (no podría especificar que tipo de chica), pero de todas y cada una de las miles de personas que ví aquel día, ella en particular me pareció de verdad muy hermosa, si creyera en el amor a primera vista, esa seria la descripción mas aproximada, quise tomarle una foto, hubiera deseado hacerlo, pero no pude, a ella en verdad se me dificultaba acercarme y pedirle una foto porque de verdad me atraía, tenia unos ojos muy hermosos, aun cuando no pude tomarle una foto la mire detenidamente, tanto como lo permiten esos instantes cuando el tiempo se detiene en un segundo. Caminaba acompañada de otras dos chicas que amablemente sonreían y posaban ante cualquier cámara que las enfocaba, pero ella no, ella seguía su paso indiferente y con la sonrisa ausente, como si esta fuese la primera vez que iba a la marcha, o la primera vez que salía a la calle con aquel vestido azul y esos zapatos de tacón que la hacían lucir tan femenina, no se si habrá sido eso lo que mas me atrajo de ella, el sentir esa conexión con respecto a lo solitaria que se veía en medio de aquella inmensa multitud y si habrá sido esa la misma razón que me impidió pedirle una foto, por tratar de respetar que ella no parecía tener interés en posar para ninguna cámara, pensé en seguirla y tomarle una foto a la distancia, pero únicamente me limite a mirarla hasta perderse entre la multitud...) -----

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